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La inteligencia artificial ha fomentado la optimización de recursos y la agilidad de procesos en todas las empresas que conforman el mercado, hasta tal punto que ya se emplea en los procesos de selección de personal. Incluso antes del contexto actual en el que estamos inmersos, muchas empresas optaban por las entrevistas en diferido.
Sin duda, es una práctica en auge y las empresas están implementando herramientas para conocer a los candidatos de forma rápida y ágil, reduciendo gastos y acelerando los timings de selección.
Existen empresas que utilizan software como HireVue, Visiotalent, Easyrecrue, Wepow, entre otros, para poder conocer a los candidatos de forma masiva. Su característica principal es que la entrevista no es en directo y, por lo tanto, cuando el candidato recibe la invitación de la entrevista puede realizarla en el momento que lo desee o más le convenga dentro de un plazo estipulado.
Es una herramienta que ahorra tiempo de selección a los entrevistadores, ya que criba de forma automática a las personas inscritas. Eso sí, debemos tener en cuenta que la decisión final siempre será del entrevistador.
La evaluación que lleva a cabo la inteligencia artificial se realiza en 30 minutos y se basa en 5-10 killer questions para conocer a los candidatos. Con las respuestas que aportan dichos candidatos, el algoritmo produce miles de datos, genera su primer filtro de selección y les evalúa.
Las evaluaciones basadas en inteligencia artificial asignan puntuaciones de empleabilidad basándose en las palabras que utiliza el candidato, sus expresiones faciales y su tono de voz durante la entrevista. Además, permiten valorar las soft skills y las hard skills, que son más complicadas de detectar en una entrevista tradicional basada en el CV.
En primer lugar, se debe de tener en cuenta que el candidato al puesto no dialoga directamente con el entrevistador, sino que debe contestar a las preguntas que el software le va presentando.
Las respuestas se irán registrando en la herramienta, que más tarde las enviará a la empresa de forma automática.
Cuando comienza la entrevista, se mostrarán unas preguntas de práctica para que podamos familiarizarnos con el nuevo formato de la entrevista y se indicará el tiempo asignado que tenemos para responder. Estas preguntas de práctica no quedan registradas y la empresa no las verá posteriormente. Por lo tanto, no formarán parte de la entrevista.
Es importante que revisemos nuestras respuestas de práctica, ya que nos permitirán comprobar si la iluminación, el sonido, el micrófono y el ángulo son los idóneos.
Cuando el candidato se sienta cómodo tras haber realizado las preguntas de prueba, podrá iniciar la entrevista oficial. Eso sí, hay que tener en cuenta que una vez se inicie dicha entrevista, no se podrán revisar las respuestas enviadas.
Al finalizar la entrevista, el software no asigna una nota al candidato, sino que lo clasifica en uno de estos 3 apartados:
Con los datos recogidos, no hay que olvidar que, como hemos dicho, los baremos de preselección los valora el entrevistador.
La ventaja principal de esta herramienta es que la entrevista no está fijada a un momento determinado, por lo que podemos aprovechar la situación en la que nos sintamos más cómodos para iniciar el proceso.
Debemos tener en cuenta que las respuestas tienen un tiempo limitado (generalmente, se tiene un tiempo de entre 30 segundos y 2 minutos para contestar).
Así, si no estamos satisfechos con la respuesta, podemos borrarla y volverla a grabar. No obstante, no se recomienda que se abuse de esta opción, ya que se pierde naturalidad en las respuestas.
Es importante mirar directamente a la cámara cuando respondamos a las preguntas. De esa forma, a pesar de ser una entrevista en diferido, el entrevistador tendrá la sensación de tener un contacto visual cercano con el candidato.
Además, debemos llevar una vestimenta correcta para transmitir una imagen profesional y expresarnos igual que lo haríamos en una entrevista presencial. Aquí también cobra especial atención la iluminación, el ángulo y el fondo.
Por ello, es esencial que nos comportemos de manera natural y que tratemos de sintetizar nuestras respuestas expresando aquellas ideas que consideremos más relevantes, ya que el algoritmo detectará si estamos siendo demasiado amables o empleando palabras clave en exceso.
Si nuestra conexión falla durante la entrevista, es preciso cerrar el navegador y volver a acceder a la invitación de la entrevista. De forma automática, nos llevará a la última pregunta sin responder.
Pero, si, en cambio, hay un error de conexión en medio de una pregunta, lo más probable es que esa pregunta haya sido enviada, por lo que se debe finalizar la entrevista de manera normal y natural e informar al seleccionador del error que se ha producido en esa pregunta.
A continuación, presentamos algunas preguntas frecuentes que podemos encontrar en las entrevistas en diferido:
Como ocurre con todos los eventos novedosos que entraña la transformación digital, existen defensores y detractores de la inteligencia artificial, pero debemos ser conscientes de que es una práctica que está creando un espacio de oportunidad en los procesos de selección y es conveniente estar preparados para dominar este nuevo sistema.
